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Bloomsday

tun tun tuntundundundundun
tun tun tuntundundundundun
tun tun tuntundundundundun

En que estaba pensando cuando puse Rockafella Skank como tono de alarma? acaso que hacía más animadas las frías mañanas de la ciudad de la eterna primavera?, en fin apenas y las 6:05 am, parece un buen día para llegar tarde al trabajo, una vez más, sin poner cara de remordimiento por aquellos que madrugan.

Pasada por agua fría, con el pensamiento que la hora del baño diferencia los valientes del resto del mundo como excusa para no usar el calentador y pensando una vez más que prefiero trabajar en jeans y tenis todos los días, bajo la escalera y me encuentro con esa sonrisa que derrite el más frio de los hielos y que me tienta a hablar con voz de ternura para decir "buenos días princesa hermosa" y poner un beso sincero que no parece desgastado en la frente de aquella hermosa criatura, que atina a decir sssssssa-sssssssssa-ssssssssssa y menea su grácil figura al ritmo de Mani y su combo de herramientas, entonces con una sonrisa retorcida deseo una vez más que los siguientes seis meses eliminen de la faz de la tierra todos lo relacionado con el dinosaurio morado con verde para no tener que odiarlo mientras me piden que canten sus canciones.

El desayuno, el nudo de su corbata, el cepillar de dientes, decir adiós, pedir una bendición, dar una bendición, tomar el taxi y encender el modo automático, hasta que suena un avemaría y me doy cuenta que la emisora cristiana seguirá conmigo por diez minutos, y entonces pienso, otra vez, que de creer en el infierno el mío se concentraría en dar charlas sobre dios a muchos creyentes, con la biblia en una mano y agua bendita en la otra, mientras que han pasado 5 minutos y al mirar la ciudad desde el deshecho mirador y futura doble calzada y aunque que hay algo de neblina se alcanza a distinguir un avión en el aeropuerto y un pedazo del metro como a 20 centímetros según mi lejana perspectiva y empiezo a decir, no voy en tren, voy en avión.

Buenos días, buenos días, buenos días, muy buenos días, es increíble que la frase no se gaste y siempre suene bien, a lo mejor es por la sonrisa que me acompaña todos los días, sin importar el frio, el trabajo que me espera y las muchas dolencias que ha de tener el mundo, aunque de verdad no tengo porqué sufrir o porque tener malos días, y hasta se llega a sentir bien recibir el buenos días de regreso cuando suena sincero.

Para los que el trabajo es su agonía, su pesar, su karma, la representación de todos los males de la humanidad, inicia una semana más de dolor, pero ese no es mi caso, al menos no por esta semana, así que paso el dedo índice por los 2 botones de encendido y 3 minutos después ya estoy en línea, con buena música a bordo creando la burbuja existencial de 9 horas diarias en las que soy, no soy, hago, deshago, leo, escribo, canto, recito pero que al final de la tarde se terminan, la machaca a la hora del almuerzo, revisar el correo, contestar sus llamadas y evitar poner cara da tonta mientras pienso que sigo enamorada y paso a la siguiente canción de mi reproductor musical, y recuerdo que no he leído la dosis diaria de comics así que un par de urls y de nuevo la risa de maldad que tanto me gusta me acompaña y sigo sin sentirme culpable.

Con las 4:55 hago el logout de las sessiones, tomo otro poco de agua empaco lo que necesito y pienso que solo 6 idas más al pequeño infierno personal y seré libre de clases por un tiempo y rio de modo malvado, lo que me provoca otra risa y le recuerdo a mi compañero que hoy hay otra dosis de dolor y por cosas de la costumbre puede que lleguemos tarde, nuevamente sin remordimientos de mi parte, pasando por el colectivo pirata que baja por palmas hasta san diego y siguiendo a pie en otro intento inconsciente de pasar la calle levitando sin ser victima del tráfico, soy detenida antes que un carro rojo haga de las suyas y llego con vida a la estación de exposiciones, contando con la fortuna de que el siguiente tren si para en esta estación, 18 minutos después subo las escaleras y recuerdo porque no me gustan las multitudes, creo que a lo mejor no llegue tan tarde, paso sobre el rio que huele a pegante cada vez más y en el paradero del bus espero por 16 minutos y ahora sé que voy a llegar tarde y de todas maneras no me importa, serán otros 15 minutos en bus, viendo pasar casas, personas, animales para subir otras escaleras tomar algo en la cafetería, subir más escaleras y compartir al menos 2 horas más de pensamiento con unos cuantos que compartimos la sensación elástica del tiempo cuando un suceso está a punto de llegar a su final.

El regreso en bus, metro, taxi y de nuevo en el hogar dulce, muy dulce hogar, pidiendo una bendición, dando una bendición, cambiándome la ropa y pensando de nuevo que me gusta más ir a trabajar en jeans y tenis mientras pienso que las 10 de la noche es pronto para dormir y que algo de televisión va a refrescar mi cabeza para pensar en el trabajo de mañana, que es a mano, pero no tengo ganas de ser rebelde, además el tipo me cae bien, paso de el televisor a la ventana y pienso que si, esto parece un pesebre, hago el trabajo, al menos saco el contenido, mañana saco el rato y lo paso a mano, apago las luces, veo a través de la ventana y me voy con la imagen del pesebre para la cama, y mientras caloreo la cama pienso que a lo mejor mañana es otro buen día para llegar tarde y no sentirme mal por ello.

3 Comments:

  1. Anonymous8:51 PM

    ???

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  2. Perdona el retraso, se me acumuló la faena a la deriva por las islas del bloomsday. Muchas gracias por tu colaboración

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